¿Qué son los productos Cruelty Free?

 By Begranel

El movimientoCruelty free

Seguramente a estas alturas ya conozcas lo que significa el movimiento cruelty free que aboga por los derechos de los animales y que reconoce a las marcas de cosméticos que no hacen pruebas con animales, es decir, las firmas que no utilizan conejos, cobayas o cualquier otro animal para comprobar si sus productos van a causar alergias o van a tener o no el matiz y el color que buscan.

No cabe duda, el testeo animal, está perdiendo la batalla frente a los productos de cuidado personal cruelty free, que van ganando relevancia; gracias a que poco a poco vivimos en un mundo más consciente. Dejando a un lado el interés personal enfocado sólo en ver el bienestar humano. Hoy en día, hombres y mujeres, dejamos de ser el centro de atención y empezamos a comprender, tener consciencia y reconocer la importancia de todo aquello que también forma parte de este mundo.

Es por ello, que al escoger las marcas con las que trabajamos uno de los puntos más determinantes en nuestra elección es que sean CRUELTY FREE.

¿Qué significa realmente serlo?

Un producto cruelty free significa que no está probado en animales, sus ingredientes tampoco, y que está avalado por una certificadora independiente que asegura la veracidad de ese reclamo.

Todavía hoy hay muchas personas que creen que testar en animales es probar una crema en su piel por si les genera una alergia, pero las pruebas tan solo en cosmética abarcan: toxicocinética donde se estudia la absorción, metabolización, distribución y excreción de las sustancias químicas, el daño genético embrionario o fetal, irritación de la piel o los ojos como champús, geles, etc. Toxicidad en la que se envenena a los animales con sustancias que pueden poner en riesgo nuestra salud (conservantes, estabilizantes, colorantes…), sensibilización de la piel provocando alergias y viendo su resultado, mutagenicidad causando daño genético o carcinogenicidad donde se testan ingredientes que pueden causar cáncer. 

Estos animales no sólo sufren por los efectos abrasivos que pueden ocasionar las pruebas, sino también por llevar una vida privada de libertad, aislados en jaulas pequeñas dentro de laboratorios donde muchos no reciben luz solar y mucho menos cariño. 

La cifra es escandalosa: 12 millones de animales al año son utilizados en pruebas de toxicidad. Estos son los datos de la última encuesta a la que se tiene acceso en la UE. 115 millones si hablamos a nivel mundial donde países como Estados Unidos, Taiwan, China, Alemania, Japón, Francia, Brasil, Reino Unido o Canadá son los que más testan.

¿Cómo puedo saber si un producto es cruelty free?

Existen dos formas muy simples de identificarlo. La primera es al momento de comprar el producto y verificar que el empaque incluya algunos de los tres sellos de las empresas certificadoras más reconocidas a nivel mundial: Leaping Bunny, PETA y Choose Cruelty Free. Los tres se reconocen por tener un conejo.

La segunda opción es revisar en los sitios web de alguna de las certificadoras su listado de marcas que cumplen con los estándares. Esta segunda opción es mucho más segura y veraz, ya que así evitarás consumir alguna marca que falsifique el sello sin cumplir los estándares del testeo animal.

¿Es lo mismo un cosmético cruelty free que uno vegano?

No es lo mismo cruelty free que vegano. Lo primero quiere decir que la marca no ha probado nada en animales y lo segundo, que sea vegano, cosa que también lo podemos ver en el sello, significa que no incluye productos de origen animal de ningún tipo y que además no ha implicado sufrimiento animal. Por lo tanto, un cosmético vegano sí va a ser cruelty free, sin embargo, un producto cruelty free puede no ser vegano por incluir en su fórmula, por ejemplo, huevo.

 

Esperamos que esta información te sea de utilidad al momento de decidir qué productos comprar.